sábado, 25 de febrero de 2012

Multar(me) o no Multar(me). Esa fue la cuestión.



Si un Guardia Civil me multa, ¿esto me convierte en su cliente? No lo sé, pero voy a pensar que sí y a escribir aquí lo que me pasó ayer.

Todos pensamos que nos multan injustamente. Nadie tiene la culpa cuando hay accidentes y nadie es multado con razón, sino porque "el profe me tiene manía". A mí me multaron ayer con razón, pero en circunstancias cuando menos...curiosas. Juzguen ustedes.

Esto no es irónico: respeto mucho el trabajo de los motoristas de la Guardia Civil. Me parece que durísimo estar todo el día en la carretera, con el riesgo que ello conlleva, y que el contacto con los "clientes" sea sólo para marrones. No es un trabajo que me gustaría hacer. Por ello, las pocas veces que me han parado (3 en 19 años) he tratado de ser lo más amable posible. Me han puesto tres multas y una de ellas la recurrí y la gané. La segunda ni me molesté porque decían que había pisado una línea continua que yo creo que no pisé...pero demuestra eso si tienes narices.

La tercera fue ayer. La de ayer fue rara. Y peligrosísima. 

Salgo de trabajar. Me incorporo a la autovía y cuando miro por la ventanilla izquierda me encuentro a un motorista haciéndome el gesto de los "pajaritos por aquí, pajaritos por allá". 

¡Ag! ¡Hostia tú, qué susto! ¿Un ente verde, posiblemente venido del espacio exterior, bailando en una moto al ritmo de María Jesús y su Puñetero Acordeón? No, no va a ser eso. A ver, Luis. Razona.

Ok, es la Guardia Civil. Y creo que me dice que encienda las luces. Son las 18:40 y hay luz perfectamente suficiente, pero si el motorista me dice que las encienda, como si quiere que ponga velas. Las enciendo.

Me adelantan las dos motos y mientras la primera se aleja rápidamente, la segunda se queda delante de mí. Vaya por Dios. Me lleva un rato a 90 por la autovía y al final me decido a adelantarle (límite, 120 km...pero no paso de 110). Que adelantes a un motorista y se te quede mirando te hiela la sangre. Es un momento duro, duro. Duro.

Así que se me pega detrás y palante, como si fuéramos un trenecito. Copón, ¿qué habré hecho yo? ¿Le habrá molestado que le haya adelantado? Luis Carlos: date por jodido.

Supongo que avisa con sus poderes mentales al primer motorista, que estaba lejos, y empieza a reducir el ritmo. Y aquí es donde empiezan las risas.

Yendo los tres en trenecito, sin hacerme ningún gesto, me quedo en medio. Como no me dicen nada de nada, me decido a adelantarles. No-he-hecho-nada. Creo.

Miro por el retrovisor para poner el intermitente y veo que el de detrás enciende las luces azules y las intermitencias...justo cuando íbamos a entrar en una curva que se hace a más de 100 kilómetros por hora. 

...No puede ser. Quiere que me pare...¿aquí?. Pues nada, paro. Joder, claro que paro. Ya sé qué pasa si te dicen de parar y no paras. Así que pongo las luces de emergencia, me meto en el arcén y me paro. En mitad de la curva. Los coches y camiones pasándonos a toda leche.

Se baja el Guardia Civil de delante, se me acerca y me dice:

- Buenas tardes. ¿¿¿Por qué ha parado???

Supongo que la cara de asombro que puse fue bastante cómica. No sé qué responderle, claro. El chaval se percata de que algo no encaja y cambiando el tono radicalmente, mira a su compañero y me dice:

- ¿Mi compañero le ha indicado que se pare...aquí?

Le contesto:

- Supongo que sí; ha puesto las luces azules y las intermitencias. En esos casos creo que lo que se debe hacer es parar, pero no sé el motivo.

Iba a añadir "igual he pinchado", pero coge y se va para la parte trasera y se pone a conversar con su compañero. Juraría que echándole un rapapolvo en plan "tío, ¿estás loco? ¿por qué has parado? ¿y cómo se te ocurre hacerlo aquí?"

Así que el que me había parado veo que señala la parte trasera (¿habrán descubierto el cadáver del maletero, el alijo de cocaína, el depósito oculto de armas...?).

Nueva conversación entre ellos. Y los coches pasando a toda leche junto a ellos. Fuera de coñas: no pasó una desgracia porque Dios no quiso, porque hubo un camión que pasó rozándoles, pero bien. Lo normal, en ese punto, donde todos los años hay varios accidentes.

El primer Benemérito, el que no sabía por qué me había parado el otro, se va a la parte de delante del coche. Y viene después a mi ventanilla.

Otro camión rozando.

- El motivo de que le haya parado mi compañero es que lleva las placas en mal estado. Sígame hasta la siguiente gasolinera. Cuidado al incorporarse a la autovía. 

Efectivamente, llevo las placas regular. Sabía que debía cambiarlas. Hasta puedo aceptar la multa porque supongo que hay una norma que obliga a llevarlas impolutas. No hay problema para leerlas ni siquiera en los puñeteros parking que siempre me reconocen la matrícula...pero no están muy bien, que digamos. Ok, acepto la multa.

Sé otros casos donde han indicado que "o las cambia, o la próxima vez le multaremos"...pero están en su derecho de multarme.

Pero lo triste es que me dio la sensación de que el Guardia Civil que me paró lo hizo para multarme por lo de las luces (18:40 de la tarde. Les invito a que juzguen si hay suficiente luz). El primer Guardia Civil, supongo que más veterano, le debió indicar que eso no era motivo para multarme, joder. La mitad de los coches que nos adelantaban no llevaban las luces.

Así que vieron las placas de matrícula y...200 €. 100 € con el descuento, si no recurro.

Igual me equivoco y realmente el primer Guardia Civil quería sancionarme desde el primer momento por las placas y el otro, el veterano, miraba y volvía a mirar el coche para ver si realmente lo debían de hacer o no. Las placas son TOTALMENTE legibles. 

Un montón de tráfico, como todos los viernes, la gente a toda velocidad, adelantamientos peligrosos, un atasco de mil pares en Plaza...me dio la sensación, insisto, que al Guardia Civil veterano le mosqueaba bastante el hecho de estar perdiendo el tiempo por algo así, cuando tenían trabajo para aburrir.


El resto ya es papeleo. El que NO ME HABÍA PARADO me da las explicaciones. El otro, callado, salvo para explicarme cómo llevar ordenadamente los papeles del la ITV, el permiso de circulación y demás que, yo, nervioso, no acertaba a encontrar. Muy enrollado. Me sonó a "no me odies, que igual no debía de haber hecho lo que he hecho".

En fin. Dos veces me han perdonado multas que sí debían de haberme puesto, así que una cosa por la otra. Pero pusieron en riesgo sus vidas, y la mía, parándome en mitad de una curva muy peligrosa. Un poquito de por favor, por Dios.

Uno de los camiones pasó muy muy cerca.

lunes, 20 de febrero de 2012

Papá, cómprame este IPAD3 o pongo Telecinco. ¡Lo juro!

Buenas tardes;

Vale, no es una anécdota de un cliente, pero no me resisto a colgar esta foto que me he encontrado navegando en tuexperto.com.

Igual las fotos corresponde a la tostadora de un fricki que ha descubierto el Photoshop...quién sabe.


iPad 3

Las malas lenguas dicen que será presentado por Apple entre 29 de febrero y 7 de marzo y que estas filtraciones no hacen sino intentar que salivemos vilmente. Ok, Sr. Apple: lo consiguen.

Véase que si realmente son imágenes reales, nos va a costar saber si nos hemos echado a la mochila el IPAD2, el IPAD3...o un plato cuadrado recién sacado del lavaplatos. Es que, copón, con la clavada que nos van a pegar, ya se lo podrían currar un poquito más...

También se dice que nos van a tomar el pelo, una vez más, y que van a llamarlo IPAD2S. He llegado a la conclusión que 2S (que se podría leer como TU-ES) son el principo de algo así como TU cerebro ES más tonto que el de un futbolista lobotomizado. Valga la redundancia.

Dicen que tiene más resolución que el Ipad2, al ser el "punto" de imagen más pequeño, hasta el punto de que duplicaría su calidad imagen. Mucho es eso...

iPad 3
La rumorología es también extensa sobre la cámara: la calidad de captura que alcanzaría el sensor del iPad 3, que según Next Media: 

"llegará nada menos que a los ocho megapíxeles. Recordemos que el iPad 2 hace gala de una calidad de filmación HD 720p, aunque realmente la captura requiere de unas buenas condiciones lumínicas para conseguir resultados apropiados –y eso por no hablar de la cámara en modo fotográfico, que se queda en unos decepcionantes 0,7 megapíxeles–."

...¿Habéis visto a alguien haciendo fotos con un Ipad? Da un poco como de vergüenza ajena, ¿no? Ayer mismo vi a un tipo en el Pirineo Aragónes hacer fotos a un lago, levantando los brazos y sujetando el Ipad y si os digo la verdad, hasta que me di cuenta de que era un Ipad, pensé que estaba ofreciendo algún tipo de sacrificio ritual al Dios del lago. Es curioso que si vemos a alguien haciendo fotos con la webcam del portátil nos de algo así como grimilla, y envidiemos al maromo(a) que está ahí luciendo su Gadget.

Y lo peor de todo: ¡¡¡ese tipo podría ser yo!!!

El resto de rumores ya son totalmente técnicos. Según tuexperto.com:

"La información más reciente que se ha registrado sobre el iPad 3 vendría a echar por tierra la presencia del procesador A6. Según una información publicada en el sitio WeiPhone, el nuevo tablet de Apple llevaría un chip central de proceso bautizado como A5X. Es decir, que la progresión iniciada con el A4 visto en el primer iPad y en el iPhone 4 se rompería, al menos, en términos nominativos."

Nada, tranquilos. Yo tampoco he entendido ni papa...A mí que me digan si sale el Angry Birds instalado y ya me doy con un canto en los dientes. O con un pájarraco en los dientes, vamos.

Pues nada: un Gadget más que no necesitamos para nada, que no va a mejorar nuestra vida, ni nuestro trabajo y del cual podríamos prescindir perfectamente.

Aggggg....¡¡¡¡¡Yo quiero un Ipad TU-ES a la orden de YA!!! 


sábado, 11 de febrero de 2012

Mónica Lewinksy era una emprendedora. Y vivía en mi barrio.

Hay gente que te pone muy difícil el ser comprensivo y no discutir con ellos. 

Sabréis que estáis delante de esta gente cuando de tanto morderos la lengua tenéis los calcetines húmedos. De sangre, digo. 

Entonces es cuando estáis 'disfrutando' de una persona que ha nacido para tocar los coj...las narices.

Situémonos: unos días antes de la ola de frío que me ha hecho sacar los guantes y el gorro por primera vez en tres años, tuve una revelación: mi plumas de Nike, ese que tengo desde que el primer humano se planteaba si seguir en el árbol o bajarse al suelo, tenía tanta mierda que estaba a punto de tomar consciencia de sí mismo. Como Skynet, pero versión asquerosa.

Llegaba a un punto que el propio abrigo me recomendaba de palabra no usarlo: "Eh, tío. ¿me vas a usar? ¿no sabes que me da vergüenza salir así a la calle? Si me sacas de esta guisa, prometo usar ese cordón que sirve para ajustarme por la parte de abajo...y que llevas MUY cerca de los genitales..."

Este último argumento me convenció: a la tintorería a gastarme 12 euros. 

He de decir que llevaba varias manchas elegantes. De esas que dicen de tí que eres un guarro, pero un guarro que se lo curra. De calidad. Capriche de Dieux!. 

Sobre todo una en el hombro que no aventuro cómo me eché. Teniendo dos hijas, cualquier cosa es posible. Cualquiera.

Decir que sin tener nada que ver con el origen (supongo), Mónica Lewinsky hubiera estado orgullosa de mí, como High Scorer Woman en el arte de las manchas. Adoro a esa mujer por su espíritu emprendedor: jamás una persona ha sabido sacar mayor partido a una mancha.

Eso se llama "visión de negocio". Vio venir la oportunidad (perdón por la expresión) y montó un negocio de repercusión internacional.

...siempre me he preguntado en qué momento se le ocurrió el plan. Antes, durante, después...

Yo creo que fue en la Tintorería. Me explico.

De hecho yo creo que Mónica bajaba a la misma que yo y que le pasó alguna historia como la que me sucedió a mí y, en vez de cabrearse, decidió sacarle partido a la ineptitud de la dependienta...para gran pena de Bill Clinton. Pena posterior. Supongo que alguna alegría sacaría el del saxofón del tema. Claro.

Que me salgo del tema. Volvamos a la historia.

Total que me llevo mi plumas, no el vestido de Mónica, a la Tintorería que tengo más cerca de casa y le digo a la chica: 

- Yomim-mo. Buenos días. Mira, te traía este plumas, pero ya te aviso que aunque lo pone en la etiqueta, NO LO LAVES EN SECO que no salen las manchas. Te aviso porque siempre-siempre me lo tenéis que repetir. 

- Dependienta: No te preocupes. Aunque lo diga la etiqueta, siempre lavamos en mojado.

Hombre tía. Eso no me da mucha confianza, ¿eh?. Si te pasas por el forro las recomendaciones de la prenda al menos no me lo digas, ¿no?

Pero bueno, es igual. Yo ya lo había avisado.

Así que a las 24 horas, y con la ola de frío en ciernes, voy a buscar el abrigo...sabiendo lo que iba a pasar. Me entregan el abrigo, lo saco de la bolsa y, of course, ahí seguían las manchas. 

CONVERSACIÓN MOLONA CON LA DEPENDIENTA

- Yomim-mo: Oye, perdona. Las manchas no se han ido..

- Dependientaguay: ¿Qué? ¿Seguro?

- Yomim-mo: Sí sí. Compruébalo tú mismo si no te fías (sonrisa conciliadora).

Aquí es donde empieza a complicarse la cosa

- Dependientaguay: Hombre, no ha quedado perfecto, pero está mejor que antes. Si te fijas, la mancha del hombro ESTÁ MUCHO MEJOR.

Oh, ah. ¿Qué acaba de decir esa mujer? ¿Lo he entendido bien?

A ver, hija de mi alma. No estamos hablando de mi dolor de espalda o de un sarpullido genital. Una mancha NO-PUEDE-ESTAR-MEJOR. O está o no está. Si está, es una guarrada. Si no está, entonces la cosa SÍ ESTÁ BIEN.

Evidentemente uno no espera que le digan eso y se queda como atontao. Me doy cuenta de que la sonrisa conciliadora sigue en mis labios y la borro de un plumazo y me la quedo mirando intentado averiguar si es que la tía se está riendo de mí, es una mujer que se siente herida en su orgullo porque estoy atacando su trabajo...o si es tonta de verdad. 

- Yomim-mo: ... 

No sabía qué decir, la verdad. Salvo alternar mi mirada entre la puñetera mancha del hombro y la chica esta.

La dependienta se debió dar cuenta de que empezaba a llegar al punto de ebullición y me dijo:

- Dependienta: De todas formas no pasa nada. Lo volvemos a lavar y listo.

- Yomim-mo: Pero, ¿me lo vais a dejar bien o va a volver a salir con la mancha mejorada? Es que si no van a salir las manchas, me devolvéis el dinero y me lo llevo a otro sitio...

Ahí yo ya había salido de ni asombro y estaba un poco enfadado. Copón. Y la tía ya cambia su expresión y se la empieza a ver realmente ofendida...

- Dependienta: Mira. Me lo dejas unos días y así nos aseguramos...

Hala...todo el puente de mayor frío del año, sin plumas. Viva y bravo. Pero, ¿qué iba a hacer? El Plumas tenía vida propia. Tenía miedo de que me agrediera en los gitanales, recuerden.

CONCLUSIÓN

Unos días después voy a buscar el abrigo. Y, efectivamente, estaba completamente limpio. 

Estoy ya me había pasado antes, por lo que sé que independientemente de las milongas que cuenten, la primera vez siempre lo lavan en seco. Supongo que por ahorrar agua, o qué se yo.

Así que se lo digo:

Yomim-mo: Siempre me tenéis que lavar este abrigo dos veces. Ya estoy acostumbrado. Si me hubierais hecho c...(no me deja acabar la frase)

Dependienta: ¡Pues hombre, parte de la culpa la tienes tú POR NO AVISARNOS!

Tira. Para qué discutir. En ese punto no va a reconocer que sí se lo avisé, así que sin contestarle cogí el abrigo y me largué. Me he propuesto a mí mismo no volver allí...como hago siempre. ¿Se puede ser más capullo?

Hala. Ya puedo usar mi inmortal abrigo. Otro año más. Y van...



sábado, 21 de enero de 2012

Hola. Soy Hacker e Idiota. ¡Ríanse de mí!

No te preocupes, chata. A ello vamos. Tus deseos son órdenes.

No todo el mundo puede robar, está claro.

Leyendo la prensa "seria", si por seria se puede entender a periódicos como El Mundo, El País o subjetivo-panfletos similares, nos damos cuenta de ello.

Ladrones que se quedan dormidos en la casa a la que entran a robar, después de copular. O los que se dejan un comprobante de un pago con tarjeta en el domicilio robado. O aquellos que se pusieron a enredar con el ordenador de la casa que estaban robando...sin darse cuenta de que estaba encendido y con la webcam en marcha.

No me resisto a contar alguna más: el que manda un 'anónimo' amenazando a un conocido...en un folio con el membrete de la empresa en la que trabajaba. O el que roba un coche sin apenas gasolina y llena el depósito pagando con tarjeta.

En fin. Un sinfín de que gente que se da cuenta 10 minutos tarde que robar tampoco es lo suyo. Insisto en lo de "tampoco" porque me da a mí que la lista de "pa-esto-no-sirvo" de este tipo de personas es más larga que la lista de personas que se han reído de Remedios Cervantes en las últimas semanas, tras su espectacular actuación en el programa de Carlos Sobera. 

La chica cuyo caso voy a contar ahora creo que puede entrar dentro de este grupo de Lumbreras Sin Fronteras, con el agravante de que a esta mujer su robo pudo salirle caro. 

Esta anécdota no me ha pasado a mí. Sólo me la han contado y, por suerte o desgracia, conozco a todas las partes y puedo dar fe de que es cierta.

Esto me lo contó un amigo mío informático. Algo más que amigo, pero no vamos a entrar en detalles.

Un día fue a comer a casa de su suegra. Se acababa de poner ADSL hacía pocos días. La mujer le comenta que había una luz parpadeando continuamente en "el cacharro ese" (el router). Le preguntó a mi amigo si esto era normal.

La luz que parpadeaba era la que indicaba que alguien estaba usando internet. Y en casa de la suegra el ordenador estaba más apagado que las luces del Aeropuerto de Castellón (el que no ha visto un avión nunca). Por si hay algún despistado, decir que esto normalmente significa que algún vecino está haciendo bueno el refrán ese de "compartir es vivir". Vivir la experiencia del ADSL gratuita compartiendo por el morro el ADSL del vecino, claro.

El yerno empieza a indagar, porque la contraseña del router se las traía. No es de las que esos programitas que hay por ahí y que nadie reconocer usar, podría sacar fácilmente. Así que le pregunta a la suegra si alguien más ha visto la contraseña.

Resultaba que una vecina, la muy desgraciada, al contarle que se había puesto ADSL por fin, se ofreció voluntariamente a hacerle pruebas y ver si le funcionaba bien, a velocidad correcta. Así que aprovechando que hacía las pruebas, se apuntó la contraseña. Para probar si funcionaba también desde su casa, claro.

Así que la tipa esta se aprovechó de la mujer mayor para afanarle el ADSL. 

No estoy a favor de que nadie le robe el ADSL a nadie, pero reconozco que hay niveles: si te lo curras y revientas la seguridad, pues bueno...eres un ladrón, pero (no sé el porqué) haces algo así como gracia. Eres un hacker, no un ladrón. Ohhhhh. Y si uno no se molesta en proteger lo suyo...pues bueno, te la juegas. Pero de esta manera, aprovechándose de una mujer mayor, se me llevan los diablos.

Volvamos a la historia.

El yerno informático se mete en el ordenador de la suegra y mira las conexiones activas. Efectivamente, estaba un ordenador de fuera de la casa. La vecina. Perfectamente identificable.

Iba simplemente a cambiar la clave, pero sabiendo de lo limitado de la muchacha (no tan muchacha; ya tendrá sus cuarenta y muchos), se le ocurre probar a ver si ha sido tan torpe como para no protegerse. Y ahí estaba. Con menos protección que la piel de los ingleses sexagenarios que veranean en Benidorm.

Es como si El Dioni, el día que se fue a robar el furgón y se fugó a Brasil, se hubiera dejado una tarjeta de crédito con el PIN apuntado en un pos-it. En el asiento del furgón.

Así que la chica esta había dejado todos los parámetros de su conexión por defecto y con claves chorras: 12345 o similar. No recuerdo. Para los no entendidos, decir que para acceder desde el ordenador de la suegra al ordenador de la 'choriza' sólo había que abrir una carpeta y poner como clave "12345". Mi hija de 3 años habría podido entrar, tal y como se maneja ya el ordenador ;). Esta no me pedirá la propina: se hará una transferencia entre cuentas bancarias.

A partir de aquí, pues eso: échenle imaginación.

Documentos privados, cuentas bancarias, correos electrónicos...y fotos. Tenía acceso a todo el ordenador de la chavala. Insisto en lo de las FOTOS. No-sé-si-me-entienden. Ejem.

Eso es: eso que ustedes se están pensando. Premio.

Esta chavala tuvo suerte. Un tío menos buenazo que este la podía haber fastidiado pero bien. Desde borrarle todo el disco duro hasta...insisto en que le echen imaginación. Cuentas bancarias, contraseñas, documentos privados, fotos que compartir....

Pero como este hombre es un trozo de pan, se limitó a salir del ordenador, cerrar la conexión y cambiar la clave del router de la suegra. Y ni siquiera subió a ponerle la cara colorada, a la tipa. Reconozco que yo jamás habría dejado pasar esta oportunidad de hacer pasar un mal rato a un personaje de estos...qué quieren que les diga. No soy buena persona. Pero huelo bien, eso sí.

Cierro este post con la siguiente pregunta. ¿Qué habrían hecho ustedes en esta situación, en caso de haber sido el yerno informático?

Piénsenlo y, si tienen a bien, lo comentan.

Buenas noches.



sábado, 14 de enero de 2012

Ir de rebajas...y acabar en pelotas: Tangas de invierno.

Seguro que al leer esto la mayor parte de la gente ha pensado lo evidente: este tío le ha metido caña a la VISA hasta el punto de que ha tenido que dejar en prenda hasta los calzoncillos para pagar la última compra.

Bueno, la penúltima. Para pagar la última siempre te queda la opción de vender tu cuerpo (y conozco gente que se lo plantearía muy seriamente si en el Zara permitieran pagar así). Claro, que si eres como yo, poco agraciado, en vez de llevarte la compra lo más probable es que te lleves una somanta de leches. No por pervertido, sino por desagradable. Los espejos, como el algodón, no engañan.

Pero no hablemos del sentido del humor que tuvo Dios conmigo el día que me hizo. Todos sabemos que trabajar con resaca es malo, y el Santísimo la noche anterior había tenido la despedida de soltero de un cuñado.  Y se complicó, se complicó...y luego me hizo a mí en pleno bajón. Dejémoslo.

Volviendo a la historia...si bien la idea de irme en pelotas del Zara me va a quitar el sueño mucho tiempo...he de decir que esta anécdota no tiene que ver nada con la VISA, y sí con las bolsas estas de papel que ahora dan en las tiendas de ropa, sobre todo en las caras.

Esto sucedió hace ya meses, en una de las mil campañas de rebajas que ha habido este año. Tantas ha habido, que cuando paso por una tienda y no veo un cartel de REBAJAS, DESCUENTOS, LIQUIDACIÓN...hasta me sabe mal y pienso "qué sobraos".

Fue uno de los primeros días que dejó de hacer frío, así que sería por abril o mayo. Algo así.

Iba yo con mi mujer por la calle, no por acompañarla sino porque su VISA me había pedido protección policial ya que temía por su integridad física. Ahí estaba yo, tirándome en plan Kevincostner en El Guardaespaldas, para evitar que los malvados TPV de pago hicieran daño a mi VISA, y andábamos paseando por la zaragozana zona de la Plaza de Los Sitios, donde hay cienes de tiendas carísimas. De esas que si pasas lo suficientemente cerca del escaparate, te cargan 3 € en la tarjeta de crédito.

No sé qué pintábamos por allí, porque cuando intentamos entrar en esas tiendas pijas, las dependientas nos tiran piedras. Como dice un amigo, "olemos a pobre".

El caso es que estábamos por allí. Aparentando.

Unos 20 metros por delante de nosotros vemos salir de una tienda de esas que dan miedo, de las que das un rodeo para no pasar cerca (3 € por pasar cerca del escaparate, recordad), una señora de unos 40 años que, por decirlo claramente, estaba la tipa espectacularmente bien. No lo digo yo, lo dijo mi mujer. La señora aparentaba los años que tenía, pero tenía un tipazo, llevaba un vestido como de raso que decía "CUESTOUNHUEVO", bastante corto y...la señora tenía unas piernas impresionantes.

(No estoy recreándome en ello; es importante para la historia).

Nosotros nos paramos en el escaparate para decir algo así como "¿¿¿de verdad alguien paga 400 € por un bolso???" o similar, mientras intentaba arrastrar a mi mujer BIEN LEJOS, así que la señora esta nos sacó unos metros de ventaja. Iba cargadísima de bolsas, que llevaba colgadas en el brazo derecho.

Las mujeres que leen este blog igual ya se han hecho una idea: un vestido de raso, cortísimo...y unas bolsas colgadas en el brazo rozando el vestido...la cosa tiene su peligro.

Efectivamente: conforme iba andando, las bolsas de cartón iban subiendo centímetro a centímetro el vestido de la señora. El centímetro pasó a ser cuatro dedos.

Mi mujer me avisa de ello (como si yo no me estuviera fijando, ejem) y me dice

- Cuanto note el viento fresco en cierta zona, se dará cuenta.

El caso es que porque quizá porque era un día en que ya hacía calorcillo, porque la señora tenía el culo de cartón piedra o porque el tanga que llevaba era térmico...la tía no se daba cuenta.

Así que cuando, os lo juro, tenía gran parte del moflete derecho a la fresca...hasta el punto de que se le veía el tanga (durante un rato pensábamos que ni llevaba ropa interior)...y con la calle abarrotada de gente, le digo a mi mujer

- Joder, Carmen...dile algo a la pobre que estoy empezando a dejar de disfrutar con la vista y me está empezando a dar pena.

Ella me dice que le da corte, que no sabe cómo decírselo

- O se lo dices tú, tía, o se lo digo

Y ahí metió la pata. Me dijo:

- No tienes huevos.

Huyyyy, lo que me ha dicho mi mujer. Huy, que ha dudado de mi virilidad. Con lo macho que soy yo y las uñas tan estupendas que me han dejado en la manicura...

Así que aceleré esos metros de distancia, le toqué en el hombro y le dije

- Disculpe que la moleste...pero lleva la parte trasera del vestido subida hasta la cintura.

Iba a hacer un comentario gracioso también, pero viendo el cambio de cara de la pobre mujer, decidí meterme la gracia en un sitio que no voy a decir.

Se bajó el vestido como pudo, que hay que ver lo difíciles que son la cosas fáciles cuando uno las hace cuando si le fuera la vida en ello.

Mi mujer nos alcanzó y seguimos adelante, con la sonrisa en los labios. Mi mujer destacaba, una vez más, la poca vergüenza que tengo para según qué cosas.

Y al rato oímos que nos dicen por detrás

- Muchas gracias -

La mujer, roja como un tomate, nos dedicó una sonrisa cómplice. ¿He dicho ya que era muy guapa?

viernes, 16 de diciembre de 2011

Huy, esto ya estaba así cuando lo compré...(parte 1)


Siento la calidad de la foto, pero es la que me han enviado.

Se que es difícil de identificar qué narices es esto, pero precisamente la gracia de la misma está ahí: en que es condenadamente complicado saber qué copón es...

Imagínense que ustedes trabajan en un servicio técnico oficial de ordenadores y les llega un equipo con una hoja de averías en la que pone "EL ORDENADOR NO FUNCIONA".

Y van ustedes, abren la caja en la que viene y se encuentran esto. ¿Qué les parece? ¿Cómo se les queda el cuerpo?

Damos fe de que el ordenador, efectivamente, no funcionaba. Sorprendentemente, eso sí. Con el buen estado en el que estaba...el puñetero ordenador.

Lo malo no es esto. Lo malo es que te digan "Ah, no no. Esto es que yo ya lo recibí así. Sería un problema de su almacén. Yo sólo sé que no funciona."



A ver, señores clientes.

Ya sé que asumen que entra dentro de la obligación de todo el mundo el usar la técnica Ysiku (Y si Kuela, cuela)...pero les rogamos un poquito de por favor. ¡Semos buenas personas, pero tenemos un límite!

Cosas que intentan/intentamos todos y no cuelan. Os pongo algunas perlas que me han ido contando mis amigos con puntos de venta:

- Mandar un ordenador chafado, devolverlo a los siete días y decir que ha dejado de funcionar...sin tocar nada. Y con marcas de ruedas en un lateral.

- Devolver un portátil, supuestamente sin usar, con el precinto roto (por supuesto: "esto me lo vendiste ya así, roto")...y que se te haya olvidado borrar las fotografías ÍNTIMAS con tu novia, del disco duro.

- Devolver un vestido de noche a las 24 horas de comprarlo, supuestamente sin usarlo, con una macha de vino del tamaño de Ciudad Real. Apestar a vinaco del malo y decir que ya estaba cuando lo compraste...y no te diste cuenta. Un dato: el vestido era en su mayor parte, blanco.

- Devolver un Roscón del día de Reyes el 12 de enero, del cual le faltaba un 90% del mismo...y decir que solicitan la devolución del importe, porque estaba malo. Y al decirles "pero si se lo han comido", contestar que sí, que es cierto. Pero que se lo comieron "muy a disgusto". Para más datos, esto fue en El Corte Inglés y le pasó a una grandísima amiga mía.

- Reclamar que te han teñido mal el pelo...tres semanas después de haber ido a la Peluquería. Y no caer en la cuenta de que en ticket indica qué te has hecho. Y resulta, ¡oh!, que no te habían teñido ellas. Te habías teñido de culo tú en casa. Colega.

En fin. Os invito a que me enviéis al correo luissoler@vinasistemas.com más anécdotas de estas porque todos tenemos decenas y decenas.

¡Buen fin de semana!

domingo, 4 de diciembre de 2011

¡Oiga!. ¡Que se le ha olvidado pagarme! ¿Oiga?, ¿¿¿Oiga???

Estos días nos comentaba un buen amigo y cliente que, por fin, un tío que le entró a comprar un portátil había conseguido alterar un Top Five preferido: Las Mejores Maneras Para Irse Sin Pagar.

Pongámonos en situación y analicemos todo lo analizable y veamos que, como se suele decir, 'esto se veía venir'.

Hay ciertas cosas que en los puntos de venta hay que saber para estar preparados ante determinados clientes que hacen que sepamos que vamos a tener problemas para cobrar:

Si estás empezando en esto de la venta minorista, tienes que tener en cuenta esto que te digo. Te va a hacer ahorrar mucho, mucho...pero que mucho dinero!




  1. Cliente entre 30 y 50 años, bien vestido y con aires de tener tres empresas. O cuatro. A veces incluso las tienen, ojo, pero la mayor parte lo único que tienen es un Máster en Darse Aires, dos licenciaturas en Cómo Echarle Morro a la Vida. Y tres etiquetas de anís del mono, que también visten mucho enmarcadas en el despacho.
  2. Quieren un equipo potente porque, ojo a este dato que es el que más nos va a indicar que vamos a tener problemas para cobrar, "El dinero no es problema". Nos ha jodido: no piensas pagarme, así que por supuesto el dinero no es problema. Hijolagranbretaña!
  3. Nos tiene dos horas para explicarle las diferencias entre todos los productos. Todos. Hasta el historial médico del taiwanés que ha ensamblado los componentes.
  4. Al final se decide por el producto que no tenemos en tienda, el desgraciado. Así que hay que pedirlo.
Hasta ahí, todo normal. Para uno que lleva 15 años en esto de venta informática, todas las alarmas se han disparado y, por supuesto, le ha pedido una señal por el equipo. Ya que, encima, este tipo de cliente tiende a no venir a recoger el producto. Si le pedís el teléfono para avisarle y no os lo da (no te preocupes, que paso por aquí todos los días)...ni os molestéis en pedirlo: no vendrá.

Pero para el pobre novato que lleva cuatro días, lo único que ve es una hipermegaventa de un producto caro, cuando normalmente estamos casi regalando los productos en tienda. Ganaríamos más vendiendo las pelusillas de debajo del mostrador, que vendiendo ordenadores ;)

Ya tenemos todo preparado para que el cliente no nos pague. Lo sabemos. No intuimos que vamos a tener problemas para pagar: Sabemos que vamos a tenerlos.

Volvamos al cliente este.

Este, como había dejado la señal, sí baja a recoger el mega-portátil.

Así que tras la frase "¿Qué me vas a regalar? Que con la compra que te he hecho, algún detalle tienes que tener con Uno de tus Mejores Clientes" y el vendedor decirle que lo siente, pero que regalar es de pobres...y bastante pobres somos ya los informáticos...el cliente coge el portátil, le da las gracias...¡¡¡¡Y se va por la puerta sin pagar!!!

A mí esto me ha pasado y reaccioné igual que nuestro cliente. Estás 2 ó 3 segundos sin reaccionar. Luego ya la perspectiva de que te hayan dado por el...portátil...te hace reaccionar y sales a la calle.

- Oye, perdona, ja-ja-ja.¡Se te olvida pagar!

El cliente se vuelve haciéndose el sorprendido y entra a la tienda de nuevo, detrás del vendedor. Y le dice:

- Hombre, "chaval" (el chaval en cuestión tendrá 34 ó 35 años): ya te pagué una señal y ahora tengo que probar el producto. No pretenderás que te pague sin saber que funciona. Ya acepté pagarte una señal...pero me ofende que salgas a buscarme hasta la calle para reclamarme 'delante de todo el pueblo' el dinero.

Delante-de-todo-el-pueblo. Eran las once de la mañana y en esa calle estaba el del parkímetro y dos señoras que iban a comprar lechugas.

En fin, paciencia.

VENDEDOR: Mire: si hay cualquier problema con el portátil, yo se lo cambio por uno nuevo. Pero si se lleva el producto, tiene que pagarme...porque es que además no le conozco de nada, lo siento.

Cuando me sucedió a mí, que dije algo parecido, la respuesta fue buena, de las que gustan: "Oye, ¿de verdad no sabes quién soy yo?". Frase exasperante donde las haya. Yo le cogí el portátil de las manos al cliente y le dije que cuando bajase con el dinero, se llevaría el producto. 

Para los que no me conocen, decirles que NO, no tengo paciencia ni para usar los abre-fácil. O me abren a la primera, o pillo las tijeras. Así que le quité el producto al cliente...y decir que acabó bajando a comprarlo.

En el caso de nuestro cliente final, el tío aún tuvo más jeta. Supongo que estas cosas las da la experiencia en tomarle el pelo a la gente.

  • CLIENTE JETA: Es verdad. No nos conocemos de nada. Así que vamos a hacer lo siguiente (si te parece bien): te doy mi número de cuenta y me pasas el cargo.

Hasta aquí y aunque hay riesgo...entra dentro de lo aceptable. Era valorable, al menos. Pero el cliente no iba a quedarse con eso. Y apuntilla.

  • CLIENTE JETA: O mejor: me abres el portátil, me lo enciendes, me configuras una cuenta de correo electrónico y eres tú el que me vas a mandar un correo con tu número de cuenta y yo te hago sin-falta-claro, hoy mismo el ingreso.
Aquí ya, mi cliente se echó a reír y le dijo al cliente: 

VENDEDOR: Reconozco que es usted un crack. He salido a reclamarle el dinero porque se iba sin pagar...y ha acabado pidiéndome que le configurase una cuenta de correo. Lo siento, pero no voy a hacerlo. Si no quiere llevarse el portátil, no se lo lleve...pero así están las cosas.

¿Reacción del cliente JETA?: echarse a reír, guiñarle un ojo al vendedor...sacar la VISA y pagarle.

y decirle, eso sí:

CLIENTE JETA: Va, venga. Que te lo has ganado. No te pongas así. Chaval.

Y es que hay clientes que no quieren pagar sólo por tocar las pelotas. No hay nada peor que un mal pagador con un huevo de dinero.

De esos que te pagan por hacerte un favor, ¿sabes?. De esos que provocan que si un día legalizan las armas en este país un 1 de enero a las 00:01 horas...a las 08:00 de ese mismo día, en las cárceles no cabría ni un alma. Y en el cementerio, tendrían que enterrar a la gente de pie, porque no cabrían.